¿Una, dos, tres…? ¿Cuántas tarjetas de crédito debe tener una persona? La respuesta a esta sencilla pregunta es simple: las que puedas manejar sin hacerte bolas.
Por regla general, la mayoría de las personas podemos administrar perfectamente hasta tres, ya contando las departamentales y las bancarias. Andar en la cartera con más de tres tarjetas implica considerar más fechas de corte, tiempos límite para pagar y, en la mayoría de los casos, comprometer prácticamente todos nuestros ingresos en mensualidades interminables.
Es casi un hecho que entre más tarjetas tengas, mayores son las posibilidades de hacerte de deudas enormes.
¿Por qué digo que tener tres es lo ideal? Porque una tarjeta sería la de la tienda departamental de tu elección, aquella que te ofrece puntos por cada compra que haces o frecuentemente tiene ofertas de tu agrado. Las otras dos serían bancarias y las podrías alternar en caso de emergencia. En mi caso, alguna vez me han bloqueado alguna por prevención e incluso he sufrido cargos no reconocidos y en lo que se soluciona el problema utilizo la otra.
Sin importar cuántos plásticos tengas, lo más importante es que no veas tus líneas de crédito como extensiones de tu salario. Es decir si tu salario es de 20 mil pesos mensuales y tienes una tarjeta con un límite de crédito de 10 mil, no significa que debas gastar al mes 30 mil pesos.
Tengas una, dos o más tarjetas, a continuación te dejamos algunos pasos básicos que debes seguir: