El año 2022 fue un periodo sobresaliente dentro del sector financiero debido principalmente a un importante crecimiento en la utilidad neta de las principales emisoras del sector.

Ello fue reflejo de una expansión en el margen financiero, ante las continuas alzas en la tasa de interés por parte de Banco de México como herramienta para intentar disminuir la desafiante coyuntura inflacionaria dentro del país. A lo largo del 2022, Banco de México realizó ocho incrementos en la tasa de referencia que resultaron en un aumento acumulado de +500 p.b. Dicha tasa inicio el año en un nivel de 5.50% y finalizó en un nivel de 10.50 por ciento.

Este aumento en la tasa de referencia generó que el margen financiero agregado del sector bancario y acumulado de los últimos doce meses (U12M) al cierre del tercer trimestre de 2022 incrementará +18.3% a/a, mayor crecimiento observado en los últimos cinco años. Además, la utilidad neta agregada U12M creció +59.4% a/a como consecuencia de lo anterior, así como menores reservas de crédito y control en gastos operativos.

Ahora bien, la cuestión en mente es la siguiente: ¿Qué esperamos dentro del sector financiero/bancario para 2023? ¿Estos resultados continuarán a lo largo del año o podemos esperar una tendencia diferente?

Para 2023, pronosticamos un sólido año dentro del sector financiero; si bien, la base comparativa será alta y las variaciones no serán tan destacables, aún consideramos que existe espacio de mejora en los resultados financieros del sector.

Esto, debido a que consideramos que los altos niveles en la tasa de referencia continuarán a lo largo de 2023; el margen financiero de las principales emisoras del sector presentaría crecimientos importantes.

Por otro lado, esperamos que los principales bancos del sector muestren un índice de eficiencia estable a lo largo del año, a pesar de las fuertes inversiones en tecnología que esperamos continúen en el año dentro del sector. Esta estabilidad en dicho indicador se debe a que proyectamos que los ingresos por intereses presentarían un crecimiento mayor respecto a los gastos operativos.

Estimamos que las principales emisoras del sector presentarían ligeros incrementos en sus estimaciones preventivas para riesgos crediticios, como consecuencia de crecimientos moderados en la cartera vencida, en línea con el crecimiento en la cartera de crédito vigente.

De esta manera, ante un importante aumento en el margen financiero, reservas de crédito estables y ligeros crecimientos en gastos operativos, pronosticamos que la utilidad neta de las emisoras del sector presentaría expansiones importantes durante 2023. Si bien la base comparativa será desafiante, aún existen factores que impulsarán los niveles de rentabilidad dentro del sector.

En conclusión, debido a que no esperamos recortes en la tasa de referencia durante 2023, los bancos continuarán presentando crecimientos en su margen financiero lo que impulsaría su utilidad neta.

No obstante, debido a un posible panorama de recesión económica, pronosticamos una desaceleración en el crecimiento de la cartera de crédito respecto al 2022; sin embargo, debido a las tendencias de nearshoring dentro del país, esperamos que la demanda en el crédito continúe, por lo que pronosticamos un crecimiento de alrededor del 6.0% a/a en la cartera de crédito agregada del sector.